Si observamos la historia de la industria, podemos distinguir cuatro etapas caracterizadas por la incorporación de grandes cambios en relación a su estado predecesor. La industria 1.0 incorporó la energía de vapor y la mecanización, la industria 2.0 trajo consigo la producción en cadena y la industria 3.0 profundizó la automatización de los procesos. Cada una de ellas significó un salto que permitió mejorar la eficiencia en relación a la utilización de recursos y la llegada de la industria 4.0.
El gobierno alemán, en el año 2010, incorporó una nueva definición: la industria 4.0. La misma se caracteriza por la implementación, o un mayor desarrollo, de big data, simulación, inteligencia artificial, automatización, sistemas de integración, internet de las cosas, cloud computing, robótica y realidad aumentada, entre otras herramientas. Por ende, implica un nuevo salto en los procesos productivos.
Así es como surge el concepto de smart factories, o fábricas inteligentes, siendo aquellas las que incorporan todas estas herramientas logrando aumentar su productividad, reduciendo sus tiempos y disminuyendo su consumo de recursos. Por ejemplo, automatizando tareas repetitivas y aumentando la calidad de los productos gracias a los análisis realizados, entre otras acciones.
El pilar fundamental de las industria 4.0 son los datos. Tanto su obtención como su procesamiento y análisis. La información obtenida debe procesarse y ser analizada por expertos con el objetivo de identificar posibles correcciones y/o mejoras. Por ende, se puede observar que los datos pasan a ser el punto de partida para la realización del diagnóstico y la futura toma de decisiones.
El objetivo de cada salto tecnológico que ha presenciado la historia siempre ha sido aumentar la eficiencia en relación a la utilización de los recursos y a la mejora integral de los procesos. Recordemos que, en un mercado competitivo, la empresa beneficiada por la elección del consumidor será la que ofrezca el mejor producto, el menor precio o ambos al mismo tiempo. Por lo que, la implementación de nuevas tecnologías es fundamental para lograrlo. Sin dudas que una empresa que emplee tecnología tendrá ventaja sobre las que no lo hagan.
Escrito por AMV Soluciones, creadores de ALEA
